domingo, 27 de abril de 2008


Desde los umbrales del orgasmo, les saludan una servidora y su nueva adquisición. Por favor, llamen antes de que me lo roben.

viernes, 25 de abril de 2008

Dímelo en catalán, QueMePone



¿Cómo no voy a estar enamorada de Barcelona, si allí ahorcan al icono universal de la belleza para darte la bienvenida al WC?


sábado, 19 de abril de 2008

ESto de tener el bar de reuniones al lado de casa es un peligro. Empiezas a pedir cervezas, amparada en la sensación engañosa de que si te tropiezas te caes en tu propia cama, y acabas contándole a un desconocido las entréculas de tus intimidades. O lo que es peor, acabas escuchando las entréculas de las intimidades de un desconocido que no sabes muy bien de dónde ha salido, ni te lo planteas siquiera, que te parece que llevara ahí toda la vida, y tú también. Como si no hubiera mundo fuera de las puertas de El Negro. Sigues bebiendo cerveza, el bar ya ha cerrado, pero nos dejan quedarnos y seguir bebiendo cerveza. El desconocido se ha ido, no sabes cómo, ni te lo planteas siquiera, que te parece que nunca exisitó, porque ahora escuchas las entréculas de las intimidades de otra desconocida, mientras tus amigas hacen lo propio a pocos metros de ti, con sus propios desconocidos. Luego, los desconocidos se van yendo, y nosotras nos vamos juntando otra vez, y nos descojonamos otro rato antes de irnos nosotras también. Y así pasa la vida, cargadita de situaciones que no conducen a ninguna parte.
Piloto de aeroplano soy.

jueves, 17 de abril de 2008

¿Usted también se entretiene rastreando de dónde vienen las visitas de su blog?

El Statcounter es un invento del demonio, es como una pera en caramelo para una Mata Hari frustrada como yo. Me lío a seguir el rastro de mis visitas (cuidado, te estoy mirando a los ojos), aunque casi siempre me quedo igual que cuando empecé.

La inmensa mayoría de las visitas proceden de lugares no rastreables. Otro porcentaje bastante alto viene de páginas de blogs de amigos. Pero una abrumadora cantidad de personas procedentes del hemisferio sur de América llegan hasta aquí buscando en Google "Sexo15", "TestDePurezaSexual", "CulosPrietos" y similares. Ojo. No hago valoraciones. Me limito a describir los hechos: en Sudamérica están calientes.


miércoles, 16 de abril de 2008

StipE




Me comería sus 48 años a bocaditos de camarón, le perdonaría los 7 pecados capitales y le inventaría otros 7 más.

domingo, 13 de abril de 2008

Cazuelita de Rabo


El otro día tuve una cena de ésas en las que los hombres con corbata son mayoría. No sé qué importantísimos altos cargos ocupaban, pero desde luego ellos sí. Procuré no sentirme intimidada. Para marcar territorio, las corbatas son más eficaces que el pis de gato.
Nada más empezar a cenar, un compañero de trabajo, que definitivamente pierde aceite, recibió un sms y decidió compartirlo con todos nosotros. Así, para romper el hielo. Se ve que la noche anterior, durante una fiesta, se fue al baño a hacer lo que fuera (que mejor no entrar en el tema de la polivalencia de los WC, porque el día que yo abra un bar, tendrá baños para chicas, baños para chicos, y baños para vicios). Cuestión, que estaba él haciendo lo que fuera que hacía, cuando entró otro tipo en el baño. Le hizo un barrido de pies a cabeza y, cuenta mi compañero -sin pelos en la lengua- que, en menos que canta un gallo, estaba incrustado contra la pared, mirando a Murcia, con el culo en pompa y el pantalón por las rodillas.
Los hombres con corbata escuchaban confusos. Yo creo que se debatían entre el rubor y la sospecha de que les tocaba hacerse los modernos. Al fin y al cabo, estaban en un ambiente "bohemio". Yo me estaba descojonando viva por dentro, mientras le daba al jamón, y miraba de reojo al CorbataJefe, que estaba tan nervioso que se puso estrábico. Mi compañero no escatimaba en detalles, "pollón" p'arriba, "pollón" p'abajo. Por fin, cuando nos acercábamos ya al MomentoEyaculación, otra compañera lo mandó callar con mucha elegancia.
Mi gozo, en un pozo. Se hizo un silencio sepulcral.

- ¿Me pasas la cazuelita de rabo? - dije por fin.

Soy TAN fan de este tipo de situaciones.

viernes, 11 de abril de 2008

El Orgasmo de la Revancha


Desde que estuve en Argentina, siempre compruebo si me devuelven bien los cambios.



Antes, nunca lo hacía. Como Blanche Dubois, confiaba en la bondad de los desconocidos. Pero allí me di cuenta de que los desconocidos no conocen la bondad.
Un buen día, a mitad de viaje, cuando pagaba un disquito de Los Pericos en una microtienda de la Avenida Santa Fe, descubrí con horror que me estaban devolviendo casi 4 euros de menos. Por gallega, me juego los tacones. Encendí la luz de alarma, y decidí poner a prueba al argento medio, para entretenerme. Y para ahorrar. Tate. Premio gordo para ellos. NUNCA, ni una sola vez, me dieron el cambio bien. Algunos se quedaban con 2 ó 3 euros. Pero los más patéticos eran, sin duda, los que me rateaban 5 ó 10 céntimos. Me parecía, además de ruin, cobarde. Si robas, roba a lo grande, por Dios, como Mario Conde.
Al principio, me limitaba a pedirles mi dinero. Pero luego, me aburrí. Eran muchos, y estaban en todas partes. Así que busqué otras maneras de recuperar lo que era mío. Empecé a confiscar ceniceros, vasos cusiosos, platos, cubiertos, servilleteros, jaboneras, rollos de papel higiénico, grapadoras, bolígrafos... que iba repartiendo entre mis amigos, con complejo de Robin Hood. Con lo mal que me sienta a mí el verde.
Y volví a España. Mi gozo en un pozo. Después de casi tres meses en Buenos Aires, sintiéndome con pleno derecho a confiscar, me quedé con una sensación horrible de coitus interruptus cuando descubrí que aquí los cambios siempre son correctos. Conservé el hábito agotador de comprobar el cambio, pero sin el placer orgásmico de poder tomar revancha.

Los argetinos es lo que tienen, son una fuente inagotable de placer ambiguo.

domingo, 6 de abril de 2008


No creo en el merchandising del amor.

Me molestan especialmente los vendedores ambulantes de rosas. Se plantan en tu mesa y te incrustan una flor en los orificios nasales, sin pensar que pueden estar creando una situación incómoda entre dos aspirantes a amantes. ¿Y si él no se la compra a la chica y ella lo interpreta como un desaire? ¿Y si se la compra, y ella no quiere follar con él?
¿Qué será lo siguiente? ¿Vendedores ambulantes de condones? ¿Vendedores ambulantes de anillos de compromiso?

martes, 1 de abril de 2008


"Hija," me dice mi madre hoy al móvil con voz afectada, "se ha muerto la mujer del tío Tomás".

El tío Tomás es el hermano mayor de mi abuela. Lo he visto 3 ó 4 veces en toda mi vida. A su mujer, ni siquiera le pongo cara. Pero toca ponerse afectada. "¿No me digas?", respondo mientras me doy la primera capa de pintauñas. "Sí, hija". Y a continuación toca describir el relato de los hechos. "Se ha levantado por la mañana, tan campante, para hacerle el desayuno al tío Tomás, y luego se ha acostado un rato. Y ahí ya, pues se ha muerto, hija. El corazón, que lo tenía delicado".

Me espanta que se haga pompa de la manera de morirse de la gente. Sobre todo cuando se mueren de una forma tan corriente. Y tan cómoda. Pero es de mala educación no hacerla.

"¡Qué barbaridad!", respondo, "Pobre mujer". Y me doy la segunda capa.